Pipo pescador

Todo se tornaba granate, las tribunas con más de treinta mil almas, y sin lugar a dudas el campeonato. El viernes lo vio a Tigre ganando en su estadio inmerecidamente a Rosario Central, el mayor aliado de Tigre en este momento es la diosa fortuna y eso es peligroso.

Mientras que Arsenal hería a Boca de muerte con un 2 a 1 en el viaducto, en nuestros pagos el campeonato nunca estuvo tan cerca en noventa y dos años.

“Habemus Pipo” parloteo durante la semana cosas sin sentido, como lo hace habitualmente. Esto queda afirmado durante los noventa minutos de juego en donde se ve un espeluznante abismo entre lo dicho y lo hecho.

Argentinos Jrs. de historia futbolística mas que grata desespero a sus antepasados y dio una soberbia clase de lo que hay que hacer para que el fútbol deje de ser un deporte popular. Dos líneas de cuatro bien marcadas que se encargaron de destruir cualquier tipo de maniobra colectiva del equipo granate.

Lanús en un partido pálido de sus jugadores clave, la ausencia de Valeri fue notoria, Pelle-Fritzler en un partido para el olvido, Acosta o Biglieri nunca pudieron aportar claridad al ataque granate.

Mientras que Sand tal vez el más incisivo de los delanteros sigue mostrando su peculiar juego de cabeza gacha, sus monólogos son notorios cuando el equipo no convierte y en verdad la falta de solidaridad es más que evidente. Esto sucede desde la primer fecha, será imposible que lo cambie en las dos que faltan. Calderón y el segundo gol del Grondona`s team es una lección para “Pepe” y su juego.

Así y todo las chances fueron claras para pasar a mandar en el marcador, en el primer tiempo Sand le erra a la pelota, luego de un delicioso pase de Valeri y en el segundo Blanco no llega a conectar un centro que lo encontró de frente al arco.

Delorte complico con su porte pero fue controlado por Ribonetto y Hoyos, no tanto el picante Hauche ex Tempeley que desnivelo con su habilidad y aprovecho los espacios que Lanús dejo por sus ansias de gol. Graieb sorprendió y no para bien, muy acelerado, un jugador con basta experiencia para generar tranquilidad a sus compañeros y no lo contrario.

Las cartas están echadas, depende de nosotros, el panorama cambio pero ganando frente a Gimnasia un empate o un triunfo de Boca frente a Tigre nos dará el tan ansiado campeo… seguimos esperando el milagro.